Lo primero que debe saber sobre el corte de las flores y las hojas de sus plantas es que no necesariamente aumentan de tamaño después de cada cosecha.
Esto significa que si vas a cortar los cogollos, debes intentar hacerlo antes de que alcancen su máxima altura y volumen. Para determinar cuando cortar marihuana, debes seguir estos pasos:
1. Observa cuánto espacio hay entre las ramas de tu planta. Si ves que la distancia entre las ramas es mayor que el diámetro del cogollo más pequeño, está claro que tus cogollos han alcanzado la madurez y debes empezar a cosecharlos.
2. Compruebe sus plantas todos los días, ya que pueden añadirse brotes durante la semana. También puede medir la circunferencia del brote más grande con una cinta métrica y compararla con las mediciones anteriores.
3. Cuando veas que el ciclo de crecimiento ha terminado, tienes que asegurarte de que la planta tiene suficiente energía para seguir creciendo. Así evitarás tener que eliminar uno o varios cogollos que ya estaban formados.
4. Por último, puedes decidir si arrancar toda la planta o sólo las ramas superiores. En cualquiera de los dos casos, debes eliminar toda la vegetación, incluidas las raíces, para que el suelo se mantenga en buenas condiciones.
5. En cuanto hayas retirado toda la vegetación, espera a que todos los cogollos estén secos y listos para fumar. A continuación, recoge los cogollos a mano y guárdalos en bolsas de plástico en un lugar fresco.
6. Después del secado, puedes utilizar los cogollos de la forma que quieras. Se pueden utilizar frescos o secos, según el tipo de producto que se desee fabricar.
7. Asegúrate de no dejar tus plantas solas durante mucho tiempo, ya que los cogollos pueden perder su sabor con el tiempo.
8. Vigile siempre sus plantas y observe cómo se desarrollan. Una vez que alcancen su tamaño definitivo, puedes empezar a cosecharlas y almacenarlas según el método descrito anteriormente.
Pasemos ahora a otro aspecto importante del cultivo de marihuana en exterior: el control de la temperatura.
Para disfrutar de los mejores resultados, hay que tener en cuenta varios factores como la humedad del aire, la velocidad del viento, la temperatura ambiente y la intensidad de la luz.
Si vives en una región fría, puedes utilizar calefactores para mantener las temperaturas deseadas dentro del invernadero. Sin embargo, si vives en un entorno cálido y húmedo, deberías considerar la posibilidad de instalar ventiladores para hacer circular el aire alrededor de las plantas.
A la hora de elegir la ubicación de su jardín exterior, debe seleccionar siempre un lugar que reciba luz solar directa durante todo el año.
Es aconsejable elegir una zona amplia en la que puedas dejar las plantas cómodamente sin preocuparte de perderlas de vista.
