Tradicionalmente en la cultura sólo usaban los pendientes las mujeres e iban colocados en los lóbulos inferiores, donde sólo se hacía un agujero en toda su vida. Se usaban los aros, aretes y pendientes de todo tipo y cierres. Pero eso es la cultura occidental, ya que los pendientes y piercings se han usado de la antigüedad por multitud de culturas en todo el mundo y para ello han usado todo tipo de materiales como la plata de Ley, el oro, huesos, acero, madera, marfil, etc...
Desde los años 50 que el tema de los piercings se introduce en nuestra cultura y ha dejado de ser un abalorio tribal.
Diferencia entre pendientes y piercings
La diferencia es muy simple... los pendientes son todas aquellas joyas que van situadas en el lóbulo inferior de la oreja por medio de una pequeña perforación, el resto son piercings.
Las perforaciones o dilataciones que se colocan en el lóbulo de la oreja están dentro de la categoría de piercings.
Los piercings tienen un nombre según su ubicación en la oreja, cara o cuerpo, hay más de 50 tipos de piercings.
Los piercings pueden colocarse en cualquier parte del cuerpo, estos son las zonas más extrañas y que posiblemente no sabías que te podías hacer una perforación.
- Cuello, en la zona de la nuca
- En el esternón, a la altura del escote
- En la cadera, a ambos lados de la columna.
- En los genitales, ya sea el pene o clitoris.
Tipos de Pendientes de mujer
En el lóbulo inferior es donde situamos el pendiente principal, por su capacidad de albergar todo tipo de formas y tamaños diferentes. Es ahí donde se puede colocar todo tipo de pendientes (aros, pendientes largos, cortos, botón, etc...) pasamos a explicarte cada uno de los tipos de pendiente más habituales que puedes encontrar en el mercado
Los pendientes de aro
Son de los pendientes más usado por sus múltiples posibilidades, ya que pueden ser muchos tamaños, lisos, con abalorios tipo Bali o con colgantes. Son un tipo de pendiente muy ligero y que está de moda por su posibilidad de combinar con otros pendientes en la misma oreja.
Este tipo de pendientes queda muy bien en mujeres con la cara ovalada, aros pequeños para las que tengan la cara cuadrada y aros maxi para mujeres con la cara de corazón o diamante. Elige los pendientes según la forma de tu cara
Los pendientes largos
Son pendientes que buscan dar una sensación de alargamiento de la cara, para ello deben tener un mínimo de 40mm de longitud y menos de 10 mm de ancho para conseguir este efecto muy recomendable para mujeres con la cara ovalada o cuadrada.
Pendientes trepadores
Los trepadores son unos pendientes muy de moda actualmente son un tipo de pendientes largos que se adaptan a la forma de la oreja pero no cuelgan, sino que trepan por ella.
Son lo contrario a los pendientes tradicionales, ya que van del lóbulo hacia la parte alta de la oreja, se sujetan por el palillo que recorre la oreja por la parte trasera que se aprieta y mantiene la presión. Suelen tener entre 20 y 40 mm de longitud
Pendientes botón o studs
Este tipo de pendientes son los de menor tamaño ya que no sobresalen del lóbulo de la oreja y tienen un tamaño reducido, ideales para combinar con otros pendientes o aros si tienes varios agujeros.
Los puedes encontrar de perlas, circonitas, diamantes, esmaltados, etc... Son unos pendientes muy usados en joyería infantil.
Consejos para elegir los pendientes que mejor van con la forma de tu rostro o cara.
Tipo de cierres para pendientes
Tal y como hemos explicado antes los pendientes son las joyas que van perforadas en lóbulo de la oreja, y donde existe una infinidad de tipos, modelos, formas y tamaños que podemos usar. Pera ello la industria joyera ha tenido que desarrollar diferentes tipos de cierre para los pendientes, y que a continuación te explicamos su uso y ventajas de cada uno de ellos.
Pendientes con el cierre hippie o de gancho
Son un tipo de cierre muy cómodo y fácil de poner, muy usado para pendientes largos y que queramos que queden por debajo del lóbulo. Es recomendable que este tipo de pendientes sea ligero para evitar alargar el agujero.
Los Pendientes con el cierre de presión
Son muy parecidos a los de rosca pero en vez de tuerca roscada es una mariposa que sujeta el pendiente por medio de la presión, son más fáciles de poner y los puedes encontrar de todo tipo.
Pendientes con el cierre de rosca
Es un tipo de cierre relativamente nuevo, ya que precisa que el palillo del pendiente y la tuerca vayan roscados. El cierre de rosca se usa en pendientes pequeños para niñas o bebés ya que la tuerca evita que sobresalga el palillo y pueda molestar, además son más difíciles de perder.
Los pendientes con el cierre Omega
Es el cierre tradicional, muy usado en pendientes de gran volumen o peso, ya que este tipo de cierre es el más seguro. El cierre omega consta de un palillo que atraviesa el lóbulo y un muelle que presiona un puente en forma de letra Omega Ω donde pasa el palillo sobre la parte trasera del lóbulo, por lo que es casi imposible que se pueda abrir
Los pendientes con cierre de ballesta o cierre catalán
Este tipo de cierre para pendientes está formados por 2 partes móviles unidas por una bisagra, en un costado está el agujero y el la otra el palillo con un muesca que al entrar en el agujero que aprisionada.
Los pendientes con el cierre oculto o cierre congo
Es el cierre usado habitualmente en los aros y aretes, sobre todo en los aros estilo Bali, ya que se aprovecha el hueco del tubo para introducir el palillo.
Tipos de piercings para la oreja
La oreja es uno de los lugares preferidos para la colocación de piercings y aunque su tamaño es reducido existen 10 tipos de piercings que te puedes poner en el cartílago, cada uno lleva su nombre según su ubicación.
Los piercings en el cartílago de la oreja son la opción más demandada que es una zona que siempre está visible y su perforación no es muy dolorosa. Aunque debido al poco flujo sanguíneo que recorre dicha zona los tiempos de cicatrización son bastante elevados respecto a otras zona. el tiempo medio de cicatrización varía de 3 a 1 año dependiendo la zona.
- Lóbulo: Cicatrización 1 - 2 meses con riesgo bajo de infección.
- Lóbulo Superior: Cicatrización 1 - 2 meses con riesgo bajo de infección.
- Piercing Tragus: Cicatrización 3 - 6 meses con riesgo alto de infección.
- Piercing Antitragus: Cicatrización hasta 9 meses con riesgo alto de infección.
- Piercing Hélix: Cicatrización hasta 1 año con riesgo alto de infección.
- Piercing Anti-Hélix: Cicatrización hasta 1 año con riesgo alto de infección.
- Piercing Daith: Cicatrización 3 - 6 meses con riesgo alto de infección
- Piercing Rook: Cicatrización 6 - 9 meses con riesgo alto de infección.
- Piercing Caracola o Conch : Cicatrización 6 - 9 meses con riesgo alto de infección.
- Piercing Snug: Cicatrización 6 - 9 meses con riesgo alto de infección.
- Orbital: Cicatrización 3 - 6 meses con riesgo alto de infección.
- Transversal: Cicatrización 3 - 6 meses con riesgo alto de infección.
- Expansion o dilatación: Cicatrización 1 mes con riesgo bajo de infección.
Recuerda que todas las perforaciones deben cuidarse y mantenerse limpias y desinfectadas para evitar problemas con tu salud. El tiempo medio que deberás limpiar y vigilar que no se infecte es de 45 días.
Tipos de piercings corporales
En el apartado anterior hemos visto los diferentes tipos de para la oreja, pero no sólo en la oreja te puedes poner uno. Los piercings como hemos visto antes es una forma de adornar el cuerpo que han venido usando miles de tribus y culturas en todo el mundo, y por ello la variedad de perforaciones es enorme.
Te vamos mostrar otras partes del cuerpo donde también te puedes poner un piercing.
- Cezas
- Nariz
- Cuello - nuca
- Esternón
- Pezones
- Ombligo
- Lengua - labios - encías
- Genitales (pene - clitoris)
- Caderas
- Etc..
Existen más de 50 puntos en tu cuerpo donde te puedes por uno, y cada uno tiene un nombre diferente, pero te recomendamos que acudas a un profesional si decides hacerlo.
Precauciones al ponerte un piercing
Ahora ya sabemos todos los tipos de piercings y pendientes, pero debemos saber que cuidados y precauciones debemos tener a la hora de perforar nuestra oreja, ya que se trata de una parte del cuerpo que tiene poco riego sanguíneo y podemos tener complicaciones si no extremamos los cuidados.
En primer lugar debemos buscar un profesional para que nos haga el agujero, ya sea para el piercing o un nuevo pendiente. Debemos abandonar la idea de que uno mismo puede hacerlo, asistir a un servicio profesional nos dará una mayor garantía de limpieza y asesoramiento a la hora de los cuidados posteriores a la perforación.
También debes tener en cuanta que cualquier perforación, ya sea para ponerte un pendiente, aro o piercing supone un riesgo, ya que tu cuerpo entrará en contacto con el material que esté fabricado. Por lo que te recomendamos que uses productos de calidad certificada para evitar posibles alergias o reacciones cutáneas producidas por el níquel u otros metales, usa piercings o pendientes hipoalergénicos
Debemos evitar hacer la perforación en momentos en los que nuestro sistema inmunológico este debilitado, ya sea por un resfriado, fiebre o tengamos el periodo, etc. Necesitamos tener nuestro cuerpo fuerte y preparado para luchar contra posibles infecciones y seguir las pautas de limpieza y desinfección de la zona.
Cuidados para los piercings en la oreja
Si al final te has decidido y te has puesto un piercing debes saber que tu trabajo acaba de empezar, es momento de cuidarte para evitar infecciones dolorosas, para ello te dejamos estos consejos que te ayudarán a evitar complicaciones.
Toda perforación es una herida abierta y como tal necesita de unos cuidados para evitar la infección, que te puede suponer dolor, enrojecimiento o que salga pus de la herida, esto lo que hará es retrasar la curación de la herida.
- Lávate las manos antes de tocarlo.
- Intenta tocarlo lo menos posible.
- Limpia y desinfecta la herida varias veces al día a poder ser.
- Evita los roces en la zona.
- Duerme apoyando la cabeza sobre el lado contrario al piercing.
- Recógete el pelo o evita que el pelo este en contacto con la zona.
- Seca la zona después del baño o ducha
- No cambies el piercing hasta que no este totalmente cicatrizado el agujero.
Recuerda que el proceso de cicatrización puede llegar durar hasta 1 año según la zona donde este puesto.
Si ya tienes cicatrizado el agujero y no muestras síntomas de inflamación, enrojecimiento ni infección, entonces ya puedes proceder a cambiar el modelo del piercing.
Para ello debemos extremar la limpieza y desinfección del nuevo piercing como del agujero, Además puedes aplicar "Cristalmina" o algún producto similar que favorezca la cicatrización y evite infecciones, si no sabes cual, acude a la farmacia. Trata de colocar el nuevo piercing con cuidado y sin forzarlo, así evitarás que se pueda volver abrir la herida y tengas que volver a pasar por el proceso de cicatrización.
Earcuff, los pendientes que no necesitan agujero
Los pendientes earcuff son una alternativa para las mujeres que no deseen hacerse más agujeros en la oreja, ya que este tipo de pendientes se sujeta por medio de la presión y es un complemento ideal para combinarlos con otros pendientes o piercings.
Ahora ya conoces los diferentes tipos de pendientes y piercings que existen para mejorar tu apariencia o look.
Si no sabes que tipo de pendientes te favorecen más, puedes leer este post donde te explicamos que pendientes te pueden ayudar a mejorar tu apariencia según la forma de tu cara o rostro.